El Paseo Gigena se encuentra estratégicamente ubicado entre el Hipódromo y El Rosedal de Palermo, a lo largo de la avenida Dorrego, este moderno paseo se posiciona como un nuevo punto de referencia y desempeñará un papel crucial.
Con una inversión total de US$28 millones, este complejo de usos promete transformar radicalmente la apariencia del entorno.
Edificado en un terreno de 11.500 metros cuadrados, este edificio albergará dos niveles dedicados a oficinas con una extensión total de 14.000 metros cuadrados, de los cuales ya se ha ocupado el 80%, dejando menos de 3000 m² disponibles para alquiler. Además, contará con 3200 m² destinados a locales comerciales, una espaciosa terraza verde de acceso público de 4000 m² y aproximadamente 250 plazas de estacionamiento.
Una característica distintiva de este proyecto semipúblico es que recicla el 80% de la estructura original. Además, completa el circuito del parque extendiendo el sendero verde a lo largo del costado del edificio hasta el techo parquizado y desciende en una rampa por el otro lado, reconectándolo de manera fluida con el parque. Esta disposición ofrece vistas panorámicas de toda la ciudad sin estar en altura. Aquí se ubicarán dos locales gastronómicos, uno de los cuales incluirá un rooftop bar.
El edificio existente, destinado a garaje vehicular exclusivamente, generaba una fuerte interrupción en el uso y el recorrido peatonal entre la concurrida e histórica Plaza Holanda, y las áreas del Hipódromo y Campo de Polo que, con sus amplias veredas, continúan el paseo hacia el norte de la Ciudad de Buenos Aires.
La decisión de no demoler la estructura original llevó a una cuidadosa reflexión sobre cómo integrar el nuevo proyecto con la forma peculiar del edificio. El cilindro en la esquina, donde anteriormente se ubicaba un tanque de agua y ahora alberga oficinas con un mirador en su terraza, rinde homenaje a la forma clásica que tenía el estacionamiento.
Frente a la discontinuidad del Parque Urbano, la modificación del edificio es una oportunidad para dotar a la Ciudad de un polo paisajístico, educativo y turístico que sea punto convocante del área. Por ese motivo hemos propuesto construir un Edificio Paisaje que resulte un articulador entre distintos puntos de atracción urbana en las cercanías del nuevo Paseo Gigena. Para lograr ese objetivo, se proyectó un recorrido peatonal que comienza, o termina, en Marcelino Freyre y las vías del FCBM y termina, o comienza, frente al encuentro de las avenidas Dorrego y Del Libertador.
Los dos tramos peatonales confluyen en el nivel de azotea actual desde donde el recorrido paisajístico se despliega en un Parque Público Elevado, con equipamiento urbano y áreas para diversos usos, entre los que destaca un recorrido educativo. El Parque posee visuales públicas y abiertas hacia el Río de la Plata, la Ciudad, el Hipódromo y los Bosques de Palermo, dotando a Buenos Aires de un equipamiento de uso público de nuevo tipo.
En la nueva cubierta la superficie de uso público, los senderos, el área verde y el paisaje de acceso restringido, suman unos 7.000 m2, equivalente al 70% de la pisada del edificio, objetivo expresado en las Bases de Licitación: «incremento de los espacios libres en la parcela con el objeto de aportar a la valorización paisajística del Parque 3 de febrero en tanto que no afecte la conformación integral del edificio existente». El nuevo edificio genera mayor vitalidad urbana, amplía el polo gastronómico del área, ofrece amplios espacios de trabajo y un paisaje basado en flora autóctona propiciando un nuevo ámbito de biodiversidad: el Parque dentro del Parque. ©
TXT I Fotos: GEM