El Museo Nacional de Catar es un espectacular edificio diseñado por Jean Nouvel, compuesto por 539 discos de color blanco entrelazados entre sí, que recuerdan a una flor mineral. Está considerado como el mayor museo de historia local del planeta.
La arquitectura de los museos siempre es un tema complejo, ya que esta debe considerar la función, flujo, e intención del edificio. Jean Nouvel, encargado del diseño de un edificio que exploraría la historia y la cultura de Catar, tenía que equilibrar diferentes dinámicas: el arquitecto deseaba rendir homenaje a los grupos nómadas que se establecieron por primera vez en Catar, pero también celebrar el rápido desarrollo económico que se produjo después del descubrimiento del petróleo en esta zona después de la Segunda Guerra Mundial.
El Museo Nacional de Catar se localiza en un área cívica junto otras instituciones culturales, por lo que está cerca de otras joyas arquitectónicas del país, como el Museo de Arte Islámico de I.M. Pei. Este sitio también está lleno de historia, ya que alberga el icónico palacio del jeque Abdullah bin Jassim Al Thani, un líder del siglo XX e hijo del fundador del Catar moderno. Su palacio, recientemente restaurado, es la pieza central del museo.
El Museo Nacional de Catar, diseñado por Ateliers Jean Nouvel y cuya construcción tomó 10 años, es una obra maestra que se alza sobre el paisaje desértico. Compuesto por discos verticales y horizontales de diferentes dimensiones, el recinto lleva a los visitantes por un recorrido de 1.5 kilómetros para descubrir la historia de esta nación de Medio Oriente. Inspirado en una formación mineral conocida como “rosa del desierto”, el diseño de Nouvel integra el pasado, sin dejar de mirar hacia el futuro.
“Simbólicamente, su arquitectura evoca el desierto, su dimensión silenciosa y eterna, pero también el espíritu de modernidad y atrevimiento que se han surgido y agitado lo que parecía inquebrantable”, dice Nouvel sobre el museo. “Lo que he buscado evocar aquí son las contradicciones de esa historia”.
Para la estructura, Nouvel recurrió a la naturaleza, señalando a la rosa del desierto como la principal fuente de inspiración. La rosa del desierto es una formación mineral endémica de zonas costeras áridas que ocurre cuando los minerales se cristalizan en áreas como cuencas de sal evaporadas, lo que da como resultado figuras que lucen como pétalos. Nouvel lo llama la “primera estructura arquitectónica creada por la naturaleza”, y quedó encantado por su complejidad.
“Tomar la rosa del desierto como punto de partida resultó ser una idea muy progresista, por no decir utópica. Digo “utópica” porque, para construir un edificio de 350 metros de largo, con sus grandes discos curvados, y sus intersecciones y elementos en voladizo –todas las cosas que evocan a la rosa del desierto– nos llevaron a enfrentar enormes desafíos técnicos”, relata el aclamado arquitecto. “Este edificio está a la vanguardia de la tecnología, igual que el propio Catar”.
La pieza central es el histórico palacio del jeque Abdulá bin Jassim Al Zani (1880-1957), hijo del fundador del Catar moderno, que antiguamente fue la residencia de la familia real y sede del Gobierno, antes de ser restaurado y convertirse en un museo.
La visita al museo sigue un circuito elíptico que sube y baja suavemente, evocando las ondulaciones naturales del paisaje. Las grandes aberturas ofrecen vistas del Howsh, los jardines del museo y de la Bahía de Doha. Las exposiciones permanentes, centradas en la historia ambiental, cultural y política de Catar, desde tiempos inmemoriales hasta el momento presente, se exhiben en once galerías. El recorrido del visitante culmina en el antiguo palacio histórico, una de las joyas de las colecciones de NMoQ, que ahora ha sido restaurado a su estado original.
El museo está rodeado por un parque ajardinado que reinterpreta los paisajes de Catar, con dunas bajas alternas, cultivos inundados y jardines inspirados en sabkhas y oasis. Con solo plantas y árboles locales, el parque cuenta la historia de Catar y cómo sus habitantes vivían y cultivaban en un ambiente hostil. Incluye un jardín patrimonial de plantas tradicionales y grandes áreas de pasto perfectas para recostarse por la noche. Un área de estacionamiento para 430 automóviles está perfectamente integrado en el parque.
La tienda inspirada en Dahl Al Misfir
Dhal Al Misfir es una caverna que es un hito natural en el área de Rawdat Rasid de Catar; la formación de sus paredes y sus recovecos, está hecha de cristales de yeso fibrosos que le otorgan un aspecto único y convierten la localización en un destino de obligada visita.
Este punto de referencia en aquel país de Medio Oriente, es una formación subterránea que es un tesoro en sí misma con paredes que iluminan la cueva con un brillo fosforescente y contienen “rosas del desierto”.
La inversión para construir el museo fue de alrededor de 434 millones de dólares, y el edificio cuenta con 40.000 metros cuadrados de superficie, compuestos por 539 discos de color blanco entrelazados entre sí.
Inspirándose en la legendaria “La Cueva de la Luz”, como es comúnmente conocido este lugar de ensueño, se ha construido la tienda de regalos del Museo Nacional de Catar en la que las enormes paredes onduladas se construyeron con más de 40.000 piezas de madera que se elevan por encima de las cabezas de los visitantes e imitan la forma y las sensaciones que produce Dahl Al Misfir.
Además, no solo se ha tratado de imitar la forma, la iluminación también trata de emular a la luz suave y difusa cenital que posee la estructura natural que ha servido como referencia.
Koichi Takada Architects, que es el estudio encargado de llevar a acabo este fabuloso proyecto, quería conectar a los visitantes del museo con los paisajes desérticos de Catar, a la vez que creaba una extensión natural del concepto “Desert Rose” creado Nouvel para el museo. ©
Ubicación
Doha, Catar.
……………………………………….
Diseño
Jean Nouvel
……………………………………….
Superficie
40.000 M2
……………………………………….
Inauguración
28 de marzo 2019
……………………………………….
Costo
434 millones de dólares
TXT: GEM . FOTOS: Web