¿Un fenómeno mundial o un reflejo de nuestro país? Cada vez es mayor el promedio de edad en que los jóvenes dejan la casa familiar. ¿A qué se debe esta tendencia? Aquí tenemos algunos datos interesantes sobre este tema.
Cada vez se extiende más la edad en que los jóvenes permanecen en la casa de sus padres, la eterna discusión es: ¿acaso los jóvenes actuales son más reacios a mudarse solos?, ¿es por vagancia o hay razones económicas y sociales que provocan esta epidemia de jóvenes ya adultos que simplemente no se independizan? Frente a este nuevo fenómeno cada vez hay más estudios en nuestro país que explican los motivos por los cuales los padres no se quedan solos en casa.
La doctora en Ciencias Sociales e investigadora principal del Programa Juventud de FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales) Argentina (organización que se dedica a la formación e investigación) Ana Miranda, asegura que este fenómeno no es excluyente de nuestro país sino que esta situación se presenta en varios países del mundo y su principal razón es que los jóvenes no tienen el acceso a una vivienda.
«No me alcanza»
«En general, en las mayoría de las ciudades, la vivienda se ha encarecido mucho. Hay una primera razón que tiene que ver con motivos económicos: los jóvenes no tienen buen acceso a ingresos laborales y además, el valor de las viviendas es bastante elevado» nos explica la Dra. Miranda.
Belén tiene 25 años, estudia relaciones públicas en una universidad privada y recientemente consiguió trabajo en una compañía como parte de recursos humanos: «Entre el trabajo y la facultad sólo vuelvo a mi casa para dormir, me parece innecesario afrontar los gastos de alquiler y expensas por el tiempo que paso en mi casa» argumenta cuando le preguntamos por qué no tomó la iniciativa de vivir sola, y aclara «ganas no me faltan».
La realidad de Belén es la de muchos jóvenes que tienen que repartir su tiempo entre el trabajo y el estudio. Federico tiene 24 años, estudia y trabaja en zona sur y vive con su papá y su hermana menor, al igual que el caso anterior su problema es económico: «a los valores actuales me es imposible vivir solo, al menos por ahora».
Ser universitario
Otra de las razones que prolongan la estadía de los jóvenes en la casa de sus padres, según la Dra. Miranda, tiene que ver con la cantidad de tiempo que llevan las carreras universitarias: «Hay varias cosas que suceden al mismo tiempo, la primera es que los jóvenes tienden a permanecer más años dentro de la educación. Y al mismo tiempo hay cada vez más estudiantes universitarios y de ahí el hecho de que más jóvenes pospongan el empezar una familia».
La doctora en Ciencias Sociales nos explica que cambió la forma de vida, hoy en día hay más jóvenes que estudian y prefieren casarse, juntarse o planear un futuro después de recibirse. Esta realidad se plantea en varios casos, los chicos no quieren planear su vida hasta no tener su título en mano. ¿Por qué? La realidad es distinta para cada chico pero hay un factor en común: quieren enfocarse en su carrera y terminarla. Este es el caso de Natalia que estudia Licenciatura en Turismo que trabaja en el rubro durante nueve horas en una agencia y después va a cursar: «Todavía no tengo el tiempo como para plantearme vivir sola, me paso muchas horas afuera de mi casa y la verdad es que en este momento no estoy para pensarlo».
Nueva juventud
Muchos jóvenes hoy en día también se plantean otras necesidades que antes no eran tan conocidas: viajar o tal vez hacer un intercambio en otro país, situaciones que demoran la emancipación del hogar. Muchos sociólogos aseguran que la etapa de los «veinti» es una edad en donde las personas prefieren tener momentos de experimentación, de probar distintas cosas antes de establecerse.
«Este proceso viene hace muchos años. Se da cada vez más y de forma más extendida, pero en nuestro país empezó en los años 90, lo que sucede y se refleja en las investigaciones es que cuando hubo crecimiento económico y de las matrículas universitarias, este fenómeno se fue expandiendo a más grupos sociales, por lo cual un fenómeno que antes era más de clases medias altas, ahora se extendió a una gran parte de la sociedad» explica la Dra. Miranda.
Los padres
Esta nueva generación de jóvenes trae consigo una nueva forma de ser padres, ya sea porque deben mantener económicamente más tiempo a sus hijos o incluso porque deben motivarlos a que busquen su propio camino. La investigadora del FLACSO Ana Miranda nos explica que lo que pueden hacer los padres es acompañar: «La importancia de los adultos es la compañía para que puedan tomar buenas decisiones, sobre todo en el tema de los estudios. Es una etapa difícil: estudiar o no, trabajar o no, son decisiones importantes que marcan el futuro de los jóvenes».
Las estadísticas en nuestro país muestran que de diez jóvenes que empiezan la universidad sólo dos se reciben y muchas veces, esta deserción está relacionada con que les lleva mucho tiempo trabajar y estudiar. Es por esto que muchas veces el apoyo de los adultos responsables es de gran importancia, el no tener que trabajar demasiadas horas para poder mantenerse ayuda a los jóvenes a terminar sus estudios universitarios.
«El que los chicos estudien en nivel universitario es realmente importante, los estudios muestran que los jóvenes que se reciben de este nivel tienen más posibilidades de conseguir una mejor oferta laboral» explica la Dra. Ana Miranda.
Hay jóvenes como Julián de 24 años que deciden hacer un sacrificio económico y vivir solos. Recientemente recibido de abogacía, nos cuenta por qué: «Estaba cansado de viajar a Capital todos los días para ir a trabajar, yo soy de zona sur así que tenía mucho viaje. Averigüe, hice cuentas y decidí mudarme solo, pagar el alquiler y demás. Es difícil y hay que hacer sacrificios pero lo gano en tiempo y calidad de vida».
La relación entre recibirse y tener un trabajo estable es de mucha importancia, como podemos ver en el caso de Julián, y explican desde el FLACSO: los chicos que estudian, encuentran un buen trabajo y se sienten motivados encuentran un camino más rápido hacia la independencia, por eso es tan importante la motivación a la hora de estudiar.
Políticas públicas
El estado actual del país acentúa esta problemática: «Siempre que hay recesión o menor crecimiento económico vas a ver que los primeros afectados son los jóvenes, ya van dos años de crecimiento económico moderado y la situación laboral de los jóvenes se debilita» argumenta la Dra. Miranda y agrega: «No veo una crisis, veo una búsqueda, y considero que es una búsqueda que tiene que acompañar el estado y la familia, para que los jóvenes puedan ir armando un futuro».
«Los jóvenes son el futuro» es una frase trillada que no deja de estar en lo cierto, los países se forman en la base educativa de su población más joven y en estos tiempos modernos, dónde los 20 años se extienden más allá del número, es importante acompañar para que esa permanencia en el hogar tenga un objetivo claro: estudiar, formarse, capacitarse con la finalidad de conseguir un mejor pasar económico que les permita planear un mejor futuro. ©
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