Elegido como una de las nuevas siete maravillas del mundo moderno el Taj Mahal es un mausoleo que esconde una de las historias de amor más significativas que se conocen entre un emperador y su esposa.
Construido entre 1631 y 1653 en la ciudad de Agra, India, el Taj Mahal tardó más de 20 años en construirse por completo. Su arquitectura está basada en los estilos persa, islámico, indio y turco. Se estima que su edificación necesitó de 20.000 hombres para llevarse a cabo.
La ciudad en la que se construyó esta maravilla se encuentra a 175 kilómetros de la capital de la India, Nueva Delhi. Es una parada obligatoria que todo viajero quiere ver una vez en la vida.
Es considerado patrimonio de la humanidad por la UNESCO desde 1983, y su nombre significa “Corona de los Palacios”.
Este mausuleo fue encargado por el emperador Shah Jahan en honor Mumtaz Mahal, una de sus esposas. Se dice que Mumtaz Mahal era la consejera inseparable y favorita de su marido.
En su lecho de muerte, durante el último parto de sus catorce hijos, fue la propia mujer quien le habría pedido a su esposo que construyera un edificio que simbolizara su amor. Y así fue como se llegó a construir el mausoleo más impresionante que jamás se hubiera construido.
Esta reliquia no solo es una edificación a orillas del río Yamuna, sino que cuenta con 17 hectáreas divididas en tres partes en las que el visitante sigue una progresión natural. Al norte, el mausoleo y sus estructuras adyacentes. En el centro, los jardines, y en el sur, la entrada.
Este mausuleo fue encargado por el emperador Shah Jahan en honor a Mumtaz Mahal, quien le habría pedido a su esposo que construyera un edificio que simbolizara su amor.
La entrada del sur cuenta con tres puertas (este, sur y oeste) que permiten la entrada y salida en el sitio turístico. En las esquinas hay cuatro pabellones, los dos mausoleos de las dos primeras esposas de Shah Jahan y dos edificios funcionales que ahora contienen la oficina de turismo.
La segunda parte son los jardines del Taj Mahal que simbolizan el Paraíso. El paisaje del Taj Mahal va acompañado de un hermoso y florido jardín de arbustos y cipreses con senderos de mármol y un estanque de lirios en donde se refleja el increíble edificio formando una postal bellísima.
La tercera parte se encuentra al norte del complejo y es una gran terraza que contiene en el centro al mausoleo, a su derecha una mezquita y a su izquierda una mezquita falsa llamada “La casa de huéspedes” que no puede utilizarse por no estar orientada en la dirección correcta.
Está construido con mármol blanco e incrustaciones de piedras semipreciosas talladas como flores y decoradas con caligrafías de versículos del Corán.
El mausoleo posee una cúpula de 40 metros de diámetro y 4 metros de alto la cual no reposa sobre columnas, sino que distribuye su peso de manera equilibrada hacia el resto del edificio.
Pasear por los jardines, estanques y pabellones que rodean el mausoleo y admirar bajo su gran cúpula las tumbas de Sha Jahan y su amada reina Mumtaz Mahal, es un camino repleto de belleza.
El palacio del amor está construido con mármol blanco e incrustaciones de piedras semipreciosas talladas como flores y decoradas con caligrafías de versículos del Corán.
La pureza de dicho mármol hace que este lugar, que no deja de sorprender por su belleza, parezca translúcido. Según como le direccione la luz, logra que su tonalidad varíe y absorba los colores que hay a su alrededor.
Existe un banco de mármol blanco situado delante del emblemático monumento que es ideal para fotografiarse con la maravilla de fondo. Tres siglos después de su creación, un 11 de febrero de 1992, la princesa Diana, se retrató en ese mismo lugar, imagen que dio que hablar por su soledad y se transformó en una de las más icónicas y repetidas fotografías de la princesa.
El Taj Mahal recibe más de 4 millones de visitantes al año y es uno de los destinos turísticos más fotografiados del mundo. ©
TXT: Grupo Editorial Metro I FOTOS: GEM